jueves, 22 de agosto de 2013

ISN'T LIFE WONDERFUL

En el capítulo anterior habíamos dicho que Griffith hace "America" en el año 24, con apoyo institucional, mucho dinero y una pareja de jovencitos sin Lillian Gish. Habíamos dicho que no le salió digamos redonda pero que vaya...y que fue su último épico.

En el 24 se va con Griffith productions a Alemania y con la misma pareja de protagonistas, menos guapetones y mejor utilizados, y cambia radicalmente el tono con esta desconocida e insólita obra que estrenará United Artists a finales de aquel año.

Basándose en una novela de Geoffrey Moss, Griffith se erige en más padre que nunca siendo un poco Murnau con su naturaleza y su río, o más alemán que Murnau, antes de "Amanecer" o "City girl", y construyendo casi casi "Y el mundo marcha" y "El pan nuestro de cada día" juntitas en una antes de que King Vidor las crease, o dando ya toda la ternura de Borzage.

La película es absolutamente magistral, domina sus notas de comedia, la lírica de la pareja que no puede casarse, la voluntad para salir adelante, o el sentimiento de fortuna por lo importante, al igual que domina su realismo social y sus apuntes crueles y certeros de clase, o la crónica de lo que sucedía en Alemania en los años 20 con la economía y su soberbia pieza de la devaluación del marco. Bueno, y si uno lo piensa, sus últimos cinco minutos son como una crónica de lo que ya era el partido nazi. Y qué decir de ese insólito cabaret en el que parece que van a irrumpir Joel Grey y Liza Minnelli de un momento a otro.

No es de extrañar que alguien apuntara en una de las entradas del blog que Griffith empezaba y se acababa él solito todo el cine, vista ésta es que yo creo que tenía que desanimarlos a todos (por suerte no lo hizo), pero desde luego ha llegado el momento de dejarlo descansar un tiempo más. O no, vaya, que le tengo echado el ojo a una que tampoco conocía y se llama "The greatest moment". Pero vaya, que tendré que alternarlo porque este director me deja exhausto de plenitud y satisfacción cinematográfica. Me ocupa y me satura todos los poros. Y feliz. Griffithopatía  feliz.











4 comentarios:

  1. Pese a sus melos puros y duros, me cuesta adentrarme en las propuestas de Griffith, Sergio. Seguiré intentándolo: tomo nota de tus notas :-)

    Abrazos.

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  2. ¿Has visto "Las dos tormentas"?

    Abrazos

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  3. Sí, Sergio. Me gusta sin apasionarme, a pesar de momentos realmente impresionantes. La tengo junto a "Las dos hermanas", bien editadas por Divisa.

    Abrazos.

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  4. Bien, bien, yo lo decía por citar la que yo considero (de momento) la quintaesencia. De todos modos me alegra que los motivos sean falta de conexión personal y no uses "El nacimiento de una nación" para cargarte toda su obra, como tampoco su condición de pionero es motivo suficiente para alabarla.

    Abrazos

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